A estos Knicks se les está haciendo larga la temporada. Tras caer ante los Wolves , el segundo peor equipo de la Liga tras ellos, les tocaba el dudoso honor de medirse a los Sixers en un duelo en las profundidades del Este. Pues bien, los Knicks siguen ganándose a su pulso el derecho a ser el peor equipo de todo el curso (balance de 14-55 ) y, seguramente, los peores Knicks de la historia. No les queda mucho. De los 13 partidos que restan, el equipo neoyorkino debería ganar nueve si quiere evitar sumar por primera vez 60 derrotas (tres temporadas acabó con un balance de 23-59, su récord negativo).
Los Sixers se gustaron (triunfo de Philadelphia por 97-81) con Nerlens Noel discutiéndole el título de rookie del año a Wiggins y Mirotic. Noel jugó su mejor partido del curso con 23 puntos , 14 rebotes, 5 robos y 3 tapones, cifras que sólo Shaquille O’Neal en su primer año en la NBA consiguió. “Él tiene que estar en el debate de novato del año”, cree Brett Brown, su entrenador. “Prestadle atención: su presencia defensiva, su habilidad para taponar y robar balones, su finalización…”. En estos Knicks a la deriva, el único que saca pecho es Alexey Shved. El ex del CSKA anotó 7 triples y se fue hasta los 25 puntos, su tope en la Liga.
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