Las quinielas apuntaban a Valverde, favorito para apuntarse el segundo trofeo de la Challenge de Mallorca. Pero en la subida al Mirador d’Es Colomer, de 3,5 kilómetros al 6,5% propicia para el murciano, Stephen Cummings, británico del MTN Qhubeka, lanzó un poderoso ataque para apuntarse la victoria. El líder del Movistar llegó a su rueda, segundo, mientras que el tercero fue el prometedor Davide Formolo (Cannondale) al frente de un trío que completaban Mollema (Trek) y Leopold Konig (Sky).
Todo en una etapa marcada por la escapada del día con diez ciclistas entre los que estaban los españoles Jurado (Selección española), Estevez (Murias Taldea) y Merino (Burgos). También el sprinter Andre Greipel (Lotto), que se dejó ver e incluso marchó un buen rato solo en cabeza. Sin embargo, el que más duró en fuga fue el sudafricano Van Zyl, del MTN Qhubeka, que ya adelantaba las ganas de vencer del equipo sudafricano, que ha recibido una invitación para el Tour 2015.
Van Zyl fue cazado en el inicio de la subida al Mirador, dando paso al grupo de favoritos. El Sky trabajaba para Konig y el Movistar para Valverde, pero fue Cummings, uno de los fichajes estrella del equipo MTN Qhubeka, el que fue capaz de rematar en la llegada con un poderoso ataque. El británico, hasta el año pasado en las filas del BMC (antes pasó por el Sky entre otros), añade esta victoria a su palmarés donde destacan en los últimos años una etapa de la Vuelta 2012, la general del Tour del Mediterráneo de 2014 (más una etapa) o triunfos en Algarve y Pekín. El corredor de 33 años además tiene un subcampeonato olímpico en Atenas, en la modalidad de persecución, en un equipo británico donde también estaba Bradley Wiggins.
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