jueves, 11 de diciembre de 2014

LeBron no se cita con Durant y el MVP decide ante los Cavs

La tarde de ayer venía marcada por la previa de un Oklahoma City Thunder - Cleveland Cavaliers que nos deparaba el primer Kevin Durant - LeBron James del curso. Un duelo que hace dos años, en aquellas Finales de la NBA, anticipaba una era de dominio y rivalidad entre los dos mejores jugadores de la liga. Pero a día de hoy la NBA sólo nos ha permitido verles enfrentados las cuatro ocasiones de temporada regular. Dos en la 2012-2013 y dos en la 13-14. No hubo más Finales, mérito de los Spurs y demérito de unos Thunder que cada año han tenido un problema diferente en forma de lesiones: Westbrook, Ibaka, etc... Mientras LeBron ha ganado dos anillos y ha jugado cuatro Finales desde 2011, Durant sólo ha podido celebrar su último MVP. Queremos más. Y llegará: 25 de enero de 2015 en Cleveland.


Y es que unas molestias en la rodilla izquierda dejaron a LeBron sin poder levantarse del banquilo que comanda David Blatt. Ni siquiera hizo la ronda de tiro previa al encuentro y los Cavaliers decidieron no arriesgar. ¿Fácil para los Thunder? "Bueno, siguen teniendo dos All-Star", explicaba Scott Brooks. Así que no, no sería sencillo.


Un Brooks que volvió a dar los 30 minutos de rigor a Kevin Durant. Un acuerdo que hace que veamos al máximo anotador de los últimos años en la NBA como 14ª clasificado de dicha estadística: 21,4 puntos por partido. Suficiente para encadenar una racha de siete victorias en los últimos ocho partidos y situarse con 9-13, rozando los Playoffs.


Después de un inicio que podríamos llamar 'Westbrook vs resto del mundo', con el base lanzando 5 de 7 en tiros de campo y el resto de sus compañeros 1 de 9, el partido se decidió en un tercer cuarto demoledor de los Thunder. Uno de esos momentos en los que el conjunto de Scott Brooks da con la tecla ataque-defensa y se convierte en imparable: convertir ese 'clic' en un partido entero es su gran asignatura pendiente. Del 47-49 del descanso al 78-66 del final del cuarto. Anotación variada y defensa, mucha defensa. Y aparición, al principio del último periodo, de un 'olvidado' Reggie Jackson, obligado a cambiar el chip de estrella a sexto hombre. Y obligado a brillar. Ibaka, por su parte, sólo jugó 25 minutos por problemas de faltas.


Al otro lado, un Irving 'tocado' después de un choque de rodillas con Westbrook y Love y Waiters tirando del carro con la ayuda de Tristan Thompson.


Los Cavaliers se acercaron a cuatro puntos con dos minutos por jugar, pero Durant decidió que no habría más partido. Anotó ocho puntos de manera consecutiva (los últimos de OKC) y cerró la victoria para unos Thunder que ya están a dos victorias y medio de los Playoffs. Carrera contra el reloj no sólo para meterse entre los ocho primeros, que a este ritmo lo harán, sino para coger una buena posición de cara a las eliminatorias por el título. Con un Oeste tan brutal como el que estamos viendo, la ventaja de campo puede ser definitiva, más en equipos con una afición que empuja tanto como la de Oklahoma City, Oakland, Portland o Memphis.






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